En un paso clave hacia la modernización y optimización del sistema de salud, el Gobierno nacional ha anunciado la creación de la Agencia Nacional de Evaluación de Financiamiento de Tecnologías Sanitarias (ANEFiTS). Este nuevo organismo autárquico funcionará en el ámbito del Ministerio de Salud, con el objetivo de evaluar de manera integral y comparativa los nuevos medicamentos, dispositivos, pruebas diagnósticas y procedimientos destinados a mejorar la salud de la población.
Un enfoque científico y multidimensional
La ANEFiTS tendrá como misión principal garantizar que las tecnologías sanitarias sean seguras, eficaces y efectivas antes de su registro y comercialización. Para ello, se basará en un enfoque riguroso que incluirá criterios de calidad, eficacia, seguridad, eficiencia, equidad y valorización ética, médica, económica y social. Este análisis permitirá determinar el costo-beneficio de incorporar nuevas tecnologías al sistema sanitario, asegurando que cada inversión tenga un impacto positivo comprobable.
El beneficio clínico será un pilar fundamental en las evaluaciones, pero no el único. La agencia también considerará factores económicos y sociales para establecer qué tecnologías deben ser financiadas con recursos públicos. Este enfoque permitirá optimizar el uso de los fondos estatales y garantizar una distribución equitativa y eficiente de los recursos.
Simplificación del marco regulatorio
La creación de la ANEFiTS busca también ordenar y simplificar el marco normativo vigente en materia de evaluación de tecnologías sanitarias. Para ello, absorberá las funciones de la Comisión Nacional de Evaluación de Tecnologías Sanitarias y Excelencia Clínica (CONETEC) y del Consejo de Asistencia Técnica para Procesos Judiciales de Salud (CATPROS), concentrando en un único organismo todas las competencias relacionadas con esta temática. Este cambio estructural eliminará la superposición de funciones, reducirá la burocracia innecesaria y evitará decisiones contradictorias que puedan afectar la coherencia del sistema.
Reducción de la judicialización en salud
Uno de los objetivos centrales de la nueva agencia será reducir la judicialización en el ámbito sanitario. Actualmente, el sistema permite que se impongan tratamientos de alto costo al Estado mediante fallos judiciales que no siempre cuentan con un análisis técnico previo. La ANEFiTS establecerá criterios claros, basados en evidencia científica y económica, para determinar qué tratamientos deben ser financiados con recursos públicos. De esta manera, se busca evitar decisiones arbitrarias que distorsionen el funcionamiento del sistema y generen un impacto negativo en las finanzas públicas.
Estructura y liderazgo
La conducción de la ANEFiTS estará a cargo de un presidente y un vicepresidente designados por el Poder Ejecutivo a propuesta del Ministerio de Salud. Ambos deberán contar con una sólida formación y experiencia en evaluación de tecnologías sanitarias. Además, el organismo contará con cuatro vocales que trabajarán ad honorem en representación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), del Consejo Federal de Salud (COFESA), de la Asociación de Facultades de Ciencias Médicas de la República Argentina (AFACIMERA) y de la Secretaría de Hacienda del Ministerio de Economía.
Para garantizar la transparencia e imparcialidad en sus decisiones, ninguno de los miembros podrá tener ni haber tenido participación patrimonial o intereses en entidades vinculadas a la producción, distribución o comercialización de tecnologías sanitarias.
Un avance hacia un sistema sanitario más eficiente
La creación de la ANEFiTS representa un hito histórico para el sistema sanitario argentino. Este nuevo organismo no solo fortalecerá la sostenibilidad económica del sector, sino que también garantizará que las decisiones se tomen bajo criterios objetivos y transparentes. Con reglas claras para todos los actores involucrados, se espera que cada peso invertido en salud genere un impacto tangible en el bienestar de los ciudadanos.
El Gobierno ha destacado que esta iniciativa responde a una demanda histórica del sistema sanitario y constituye un compromiso con la construcción de una arquitectura funcional que priorice tanto la calidad como la equidad en el acceso a las tecnologías médicas. Con este paso, Argentina avanza hacia un modelo más eficiente, transparente y centrado en las necesidades reales de su población